La cantidad y calidad de tus relaciones es una forma subjetiva de medir nuestro propio lugar en el mundo. Y no es de extrañarse encontrar opiniones donde señalan que las personas con muchas y buenas relaciones son “populares” y las con pocas relaciones son “excluídos”. Quizás puede leerse duramente su contenido, sin embargo algunos estudios demuestran que tener muchas conexiones sociales, relaciones cercanas y viejas amistades, ayuda a ser más feliz.
Y el argumento de lo anterior, es porque las relaciones sociales nos hacen más optimistas, el optimismo nos hace sentir más felices y la felicidad nos hace sentir más saludables.
Por tanto, reforzar las redes sociales de una persona contribuye a aumentar su felicidad y su salud, afectando recíprocamente de igual manera con quienes interactúa socialmente.
Sin embargo, lo anterior significa que tener relaciones realmente ¿ayuda a ser más feliz?, sí, contribuye y no es el fin en sí mismo. Porque delegar en otros nuestra propia felicidad es poco saludable y el verdadero desafío es el trabajo permanente en nuestra propia felicidad para así aportar nuestra cuota a la vida de quienes nos rodean y viceversa.
¡Ya que cuanto más feliz serás tú, más felices serán tus amigos!. Entonces, te animas a comprobarlo?