TRATA A TUS HIJOS COMO TE GUSTARIA SER TRATADO Y NO TE EQUIVOCARAS
Trata a tus hijos como a ti mismo te gustaría ser tratado , Apaga sus miedos ,
pon nombre a esas emociones que ellos no saben expresar, regálales tiempo ,
entiende sus sueños y hazles sentir como lo que son, las personas más valiosas
de tu mundo.
Resulta curioso como a día de hoy, muchas madres y padres ven la crianza con
un poco de miedo. Leen manuales de educación, se instruyen en las últimas teorías
y buscan respuesta a cada problema en Internet o en esos amigos -padres o no- que
se alzan como auténticos gurús en temas de crianza . Esos papás se olvidan en cierto
modo de escuchar algo mucho más valioso que todo esto: a su instinto natural.
Un niño no quiere gritos ni entiende de reproches, tu hijo merece ser tratado con el
arte de escuchar, la paciencia y la grandeza del afecto. Porque a los niños no hay que
«domarlos»hay que amarlos.
El instinto de una madre o la capacidad natural de un padre a la hora de intuir las necesidades
de sus propios hijos es sin duda la mejor estrategia a la hora de educarlos. Los niños llegan al
mundo con una bondad innata, así que merecen ser tratados con respeto para salvaguardar
esta nobleza de corazón, atendiendo con naturalidad y sin miedo cada acontecimiento que
nos traiga el día a día.