Autor Tema: TEN CUIDADO CUANDO HABLES (Leído 36 veces)

Boxinggirl · « **on:** 15 de Noviembre de 2024, 02:32:26 am »

Un señor ya muy grande se fue a vivir con su hijo, su nuera y su nieto de cuatro años.
Ya las manos le temblaban, su vista se nublaba y sus pasos flaqueaban.
La familia completa comía junta en la mesa, pero las manos temblorosas y la vista enferma del anciano hacían el alimentarse un asunto difícil.
Los guisantes caían de su cuchara al suelo y cuando intentaba tomar el vaso, derramaba la leche sobre el mantel.
Por las noches, el anciano no podía dormir y se levantaba haciendo ruido con sus pies.
El hijo y su esposa se cansaron de la situación.
“Tenemos que hacer algo con el abuelo”, dijo el hijo. “Ya he tenido suficiente, derrama la leche, hace ruido al comer, tira la comida al suelo y por las noches no nos deja dormir”.
Así fue como el matrimonio decidió mudar al anciano al cuarto del fondo del patio. Ahí, el abuelo comía solo mientras el resto de la familia disfrutaba la hora de comer. No convivía nunca con la familia. De vez en cuando miraban hacia donde estaba el abuelo y podían ver una lágrima en sus ojos mientras estaba ahí sentado sólo.
El niño de cuatro años observaba todo en silencio. Una tarde antes de la comida, el papá observó que su hijo estaba jugando con trozos de madera en el fondo del patio.. Le preguntó “¿Qué estás haciendo hijito?”. Con dulzura el niño le contestó: “Ahh, estoy haciendo un cuarto para ti y otro para mamá para que cuando yo crezca, ustedes vivan en ellos”. Sonrió y siguió con su tarea.
Las palabras del pequeño golpearon a sus padres de tal forma que quedaron sin habla. Tus hijos puede ser que no te escuchen...pero ven todo lo que haces.