SE BUSCA, NIÑO PERDIDO.
Perdónenme por ser un mal ser humano pero no recuerdo dónde lo he perdido, él iba a mi lado muy feliz, iba con su mirada perdida disfrutando de todo lo que veía a su paso, tenía un sonrisa hermosa, reía de todo, yo le podía hacer feliz con una paleta, este niño mío no sabía de riquezas y mucho menos de pobrezas, él se sentía libre, no vivía pensando en futuros, ni mucho menos en pasados.
Vestía un short azul y una camiseta verde de las tortugas ninjas que siempre amaba, también traía unos zapatitos color marrón que él lo usaba para todo, era el único que tenía, lo había pegado muchas veces y otras lo remendó con aguja e hilo, con ellos iba a la escuela, a los cumpleaños y hasta para jugar fútbol, pero el no conocía de pobrezas, era feliz y esa sonrisa era única ante muchas.
Quería ser bombero, doctor, hasta policía. Él era feliz con un pincel pintando lienzos, plasmando en ellos lo que en su corazón había, besaba a su madre todo los días y su padre con saludo de respeto porque es como se saluda a los súper héroes se decía, mi niño era bueno en su corazón maldad no tenía.
Por favor si alguien ha visto a mi niño, díganle que lo estoy buscando desesperado, extraño su sonrisa y su mirada de inocencia que sanaba a cualquier corazón partido, él compartía sus juguetes y también partía su pan con el vecino, contaba historias que se le ocurría y en sus letras siempre había la palabra amor que hoy lo he perdido.
Díganle que lo necesito, que me perdone por no acordarme donde lo he perdido, tal vez fue cuando cumplí 15 años y dejé mis juguetes por algunos vicios, o quizás cuando conocí aquella chica y me dejo el corazón partido, o también puede ser cuando por mis manos empezó a correr el dinero y la avaricia dejó morir los sueños de mi niño querido.
Por favor si alguien ha visto a mi niño perdido, no le digan en lo que me he convertido, mi sonrisa ahora la prostituyo y mis te amo ya no salen del corazón solo son dichos de mi boca, y en mi alma cargo odio para los que me provocan, por favor no le digan que ahora por dinero soy capaz de vender mi alma al mismo enemigo.
Lo extraño, no me gusta este ser maligno, que me perdone por haberlo perdido, quiero esos sueños de niño, donde creía que todo podía lograrlo con un chasquido, quiero volver a tener esa sonrisa pura y esa libertad que presumía, que no vivía de pasados y menos de futuros, disfrutaba el hoy como si fuera el ultimo que habría que vivirlo.
Por favor si alguien ve a mi niño perdido háganmelo saber, yo iré corriendo a su encuentro. Aunque muchos me dicen que él no está perdido, solo esta escondido, y llora en algún rincón de mi alma, pidiendo ser liberado porque yo lo oculte ahí para que no viera la maldad con que actuó y desde muy dentro de mi ser con llanto en los ojos clama.
Dios mío, ayúdame a encontrar a mi niño perdido o tal vez escondido, que no me gusta este ser en quien me he convertido.
Autor: Luis Arturo QR
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