
El primer capítulo de la final del torneo Clausura 2015-16 comenzará a escribirse esta tarde cuando Real Sociedad, con una revancha pendiente, reciba al Olimpia en el estadio Francisco Martínez.
Los tocoeños esperan hacer valer su condición de local para tomar ventaja ante los albos, un rival que en el Clausura 2012-13 le arrebataron la posibilidad de obtener su primera corona en la Liga Nacional.
Héctor Vargas tiene el reto de lograr la copa número 30 para el Olimpia, mientras que Mauro Reyes buscará la primera para la Real Sociedad, que ascendió a la primera división en 2012 y ha sido subcampeón en tres ocasiones en los últimos tres años.
Ambos equipos protagonizaron una férrea pelea por el primer lugar de las vueltas regulares, algo que finalmente se inclinó a favor de los blancos gracias a su mejor diferencia de goles. Sin embargo, el conjunto olimpista no pudo con los coloneños en ninguno de sus dos choques en la primera fase del certamen: empató las dos veces.
La visita a la parcela de los aceiteros resulta compleja para los merengues, tomando en cuenta lo poco que han ganado en esa cancha. Dos triunfos y cinco empates es lo que registra ahí el cuadro capitalino; además, ha perdido en tres ocasiones.
Olimpia llegó a la final después de eliminar en semifinales a su vecino y eterno rival, Motagua; Real Sociedad, por su parte, dejó en el camino al Real España, que fue tercero.
El club que dirige Mauro Reyes cuenta con su tridente Marco Vega, Rony Martínez y Jerry Palacios, quienes juntos acumulan 24 de los 40 goles que ha marcado el equipo. Pero del otro lado, también Olimpia tiene sus armas para enfrentar este compromiso. Carlo Costly, Alberth Elis y Romell Quioto también suman 24 dianas entre sí y se han convertido en una verdadera amenaza.
El plantel coloneño conserva cinco futbolistas que han participado en las tres finales anteriores que registra el equipo: Henry Clark, Rony Martínez, Elkin González, Osman Melgares y José Barralaga. Esto le da un extra a Real Sociedad, que se ha ido curtiendo de finales, aunque sin conseguir el objetivo hasta el momento. Eso busca revertir el técnico Mauro Reyes a fin de emular lo hecho por el Honduras Progreso, campeón vigente de Honduras.